Con el cambio climático, se prevé que los episodios de estrés térmico aumenten en los próximos años. Dado que el estrés por calor puede tener graves consecuencias en la salud y el bienestar de los animales, junto con impactos negativos en el rendimiento y la economía de las explotaciones, la ganadería debe adaptarse a esta situación.
¿Qué es el estrés por calor y cómo los animales intentan adaptarse?
El estrés térmico (ET) es cuando las condiciones de temperatura y humedad son demasiado altas para que los animales disipen el calor y mantengan su temperatura corporal en un buen nivel. El ET se define por un indicador, el Índice de Temperatura y Humedad (THI: Temperature and Humidity Index), que se calcula de la siguiente manera:
THI del rumiante = (1.8 * Tmáx + 32) – ((0.55 – 0.0055 * HR) * (1.8 * Tmáx -26.8))
Siendo Tmax, la temperatura máxima medida (°C) y la HR, la humedad relativa (%) (Lallo et al., 2018).
Un THI superior a 68 puede tener consecuencias en el animal, tratándose de condiciones ET. Existen diferentes niveles de ET que los animales intentan adaptar con diferentes estrategias para disminuir la producción de calor y aumentar la pérdida de este. Con el ET, es posible observar algunos cambios en el comportamiento animal como mayor ingesta de agua, mayores tasas de transpiración y respiración o menor ingesta de alimento (Figura 1).

Figura 1: Cambios de comportamiento durante el estrés térmico
¿Cuáles son las consecuencias del estrés térmico en los animales?
La ET tiene consecuencias en el bienestar, la salud y el rendimiento de los animales que también conducen a pérdidas económicas para la granja (1.200 millones de dólares de pérdida de beneficios anuales para el sector lácteo en Estados Unidos (Becker et al. 2020)).

Figura 2: Impacto de THI en la producción de leche en vacas Holstein (Fuente: Bernabucci et al., 2010)
1. Impacto en la salud ruminal y el rendimiento de los animales
El pH del rumen se ve afectado por el ET a través de la intensificación de la frecuencia respiratoria y la disminución de la ingesta de alimento. De hecho, la tasa de respiración intensificada reduce el pH de la sangre al aumentar la excreción de CO2. Puede conducir a una acidosis metabólica que el animal trata de controlar con una mayor excreción de sodio (Na) y bicarbonato (HCO3–) por los riñones. Sin embargo, si se excreta más HCO3– en la orina, hay menos reservas para sintetizar saliva. Como la saliva es un amortiguador natural del rumen, el pH del rumen disminuye. Además de esto, la menor ingesta de alimento provoca una disminución de la rumia que también induce una menor producción de saliva. Entonces, hay un mayor riesgo de acidosis ruminal, que es bien sabido que afecta la actividad ruminal. Dentro de la acidosis ruminal subaguda (SARA: Sub-Acute Ruminal Acidosis), la digestibilidad de la fibra también es menos eficiente. La población de bacterias celulolíticas, que digieren fibras, disminuyen con un pH inferior a 6 conllevando así a una baja eficiencia alimentaria. Como prueba de la disminución de la actividad ruminal, la producción de ácidos grasos volátiles (AGV) es menos importante. Debido a que los AGV influyen en la producción y la calidad de la leche, esta situación puede conllevar a una escasez de producción y a pérdidas económicas. Según Bernabucci et al. (2010), la producción de leche puede disminuir en 0.27 kg por unidad de THI, si las vacas Holstein se enfrentan a un THI>68 (Figura 2).
Becker et al. (2020) también reportaron sobre los impactos de la ET en la calidad de la leche, ya que el recuento de células somáticas aumenta con el THI, y la grasa y la proteína disminuyen.
2. Impacto en el rendimiento reproductivo
Una menor ingesta de alimento, combinada con requisitos de mantenimiento que pueden aumentar entre un 7 y un 25% durante la ET (Becker et al., 2020), puede afectar el rendimiento reproductivo. De hecho, la ingesta de materia seca que disminuye no es suficiente para cubrir el aumento de las necesidades de nutrientes del animal. Hablamos de un balance energético negativo, que se sabe que afecta a la eficiencia reproductiva, especialmente con las vacas primerizas. Además, el estado endocrino alterado durante la ET también explica el deterioro del rendimiento reproductivo, incluso al comprometer el crecimiento de los ovocitos (Bernabucci et al., 2010). El celo más corto y menos expresivo también es una consecuencia de la ET en la secreción de estradiol que conduce a una reproducción menos exitosa. Todo esto se traduce en una peor tasa de fecundación durante el estrés térmico que puede disminuir entre un 20 y un 27% (Bernabucci et al., 2010). Los investigadores también observaron una mayor mortalidad embrionaria con estrés térmico (Bernabucci et al., 2010).

Figura 3: Cambios de comportamiento y consecuencias del estrés térmico
¿Cómo manejar el estrés por calor?
Se pueden establecer varias estrategias de manejo de ET basadas en el confort térmico (sistemas de refrigeración, provisión de sombra) y las prácticas de alimentación (manejo, composición de la dieta).
1. Adaptación de los niveles de almidón y fibra para compensar la menor ingesta de alimento
Se recomienda alimentar con menos fibra (con un mínimo de 28-30% de NDF en la dieta) y alimentos de mayor energía como granos, grasas o azúcar (con un máximo de 26-28% de materia seca (MS) de almidón en la dieta) para mantener un buen suministro de energía a pesar de la disminución de la ingesta de alimento
2. Importancia de la alimentación con una solución tampón
A medida que el contenido de fibra disminuye y el contenido de almidón aumenta para satisfacer las necesidades de los animales que comen menos, es probable que el pH del rumen disminuya, el riesgo de SARA es mayor. La SARA afecta a la microflora ruminal, especialmente a la población de bacterias celulolíticas que disminuye, lo que reduce la actividad ruminal y la digestibilidad de la fibra. La SARA es responsable de la disminución de la producción de leche o carne. Por lo tanto, es fundamental agregar una solución tampón para mantener el pH ruminal y mantener una buena salud y actividad del rumen.
3. Ajustar del suministro de minerales
La pérdida de minerales a través de la transpiración y la orina es más importante en los animales estresados por calor, por lo que es necesario adaptar su suministro de minerales. Teniendo en cuenta esto, el suministro de sodio (Na) y potasio (K) debe aumentarse especialmente al 0.4-0.,6% de la MS para el Na y al 1.5-1.6% de la MS para el K (Akins y Schmidt, 2021). El magnesio (Mg) también debe aumentarse hasta alcanzar el 0,35-0,4% de la MS (Akins y Schmidt, 2021) debido a la interacción entre su absorción y la concentración de K (cuanto menos K, menor absorción de Mg). Es importante mantener buenos niveles de Na y K para mantener una diferencia positiva entre cationes y aniones en la dieta (DCAD: Dietary Cation-Anion Difference). La DCAD es un indicador que caracteriza el estado ácido-alcalino del animal. La DCAD de un alimento o una dieta representa su potencial «acidificante» o «alcalinizante». Se expresa en mEq/kg de materia seca y se calcula con el contenido de iones de sodio (Na), potasio (K), cloro (Cl) y azufre (S):
DCAD = [K+ + Na+] – [Cl– + S2-] = 1000 * (K/39 + Na/23 – Cl/35.5 – S/16).
Como el K y el Na son alcalinizantes (aumentan el DCAD), pueden aumentar el pH de la sangre y luego contrarrestar la acidificación inducida por la pérdida de CO2 de una tasa de respiración más alta durante la ET. Es por ello que la gestión de la DCAD es fundamental en caso de ET. Se recomienda tener un DCAD en torno a los 300-400 mEq/kg de MS durante la HS para mantener un buen equilibrio metabólico ácido-base y tener un impacto positivo en la ingesta de agua y alimento.
Las soluciones de Phosphea para gestionar el DCAD dietético y el pH ruminal
Descubramos las soluciones de Phosphea que brindan ventajas durante el ET: MSP (Fosfato Monosódico) y CALSEAPOWDER Advance (CPA).
- MSP proporciona fósforo y sodio altamente disponibles sin cloruro aportando una DCAD positiva a la formulación.
CPA es una solución tampón que estabiliza el pH ruminal de forma progresiva y a largo plazo. Garantiza la productividad ruminal y la eficiencia alimenticia y mejora el rendimiento de los animales.